1955 Rolando Garita, escultor costarricense, estudia en la Escuela de Artes Plásticas, Facultad de Bellas Artes de la Universidad de Costa Rica y la Escuela de Bellas Artes de Lorient en Francia. Los escenarios en sus obras reviven muchas de sus experiencias infantiles donde se identifican dos rasgos típicos de la niñez: la inocencia y la capacidad de asombro. El contraste entre cálidos rojos y amarillos, con los fríos azules y grises, son el resultado del artista de pasar la mitad de su tiempo en su finca en Guanacaste y la otra mitad en las montañas de Coronado, entre vacas, cabañas con balcones, hombres en bicicleta y árboles frutales. En cuanto al diseño, busca la simplicidad en la línea y las formas, siempre con mucho color, con paleta fresca e intensa. El artista expresa "Mis cuadros reflejan una visión del mundo desde los ojos de un niño, pero con un lenguaje contemporáneo y universal" Recibió el Premio Aquileo J. Echeverría en Artes Plásticas en 2010 en Pintura.